Cuando alguien anda en boca de todos los malajes, zascandilleros, ciegos y sus lazarillos, pillos, trileros, efebos y putas de los "reality chous" de todos los media de este país, comienzan a percibirse los efluvios de podredumbre que invaden a los aludidos hundidos en la mierda y de ella emergiendo con el título que los define, manchado anteriormente de sangre y ahora de excrementos, y al cartel cogidos o más bien atenazados un montón de oportunistas de lo mismo para mantenerse a flote y en el cartel reza "Corruptio optimi péssima" ‘la corrupción de los mejores es la peor de todas’. Esto es el anuncio de que la crisis los alcanza, la crisis moral y ética, la de valores que ellos aunque podían disimularlo nunca habían poseído, y los cortesanos han huido y los rodea una turba de gentes intitulada y procaz en sus expresiones porque en ese lugar se ha situado sin nadie empujarla la monarquía.
Mientras el cortesano mayor del rey-no haciendo el ridículo por "Wars-tintón" mientras arde Burgos y se agudiza el riesgo de contagio a otros lugares de este bendito o maldito país.
Pero no ha de apenarnos nada pues a cada cual lo suyo porque "Caesar caesaris, deus dei"
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