martes, 3 de julio de 2007

Y del terrorismo de Estado ¿ qué ...?

Ante la noticia de que un ministro Japonés de defensa Fumio Kyuma, en una ceremonia para celebrar el 50º aniversario de las Fuerzas de Estados Unidos en Japón en la base aérea de Yokota, ha justificado los genocidios de Hirosima y Nagasaki , y ante la proximidad del 62º aniversario de tan fatídica fecha no he podido resistirme a aportar mi opinión a estos hechos.

Las guerras modernas no se ganan solamente con arsenales armamentísticos, sino que van acompañadas de un ingente arsenal de armas de disuasión política e ideológica.
Un ejemplo: Antes de atacar Irak hay que crear la "justificación" de ese ataque ( posee armas de destrucción masiva, forma parte del "eje del mal", vamos a devolver la democracia a este país... )

En la II Guerra Mundial fue cuando mayor auge tomaron las técnicas propagandísticas de guerra que hoy se siguen desarrollando, así lo que fueron enormes genocidios se anunciaron a priori como males menores e inevitables: “en Hiroshima había un importante contingente de tropas japonés y que iba a ser bombardeado sin apenas afectar a población civil” , y la bomba de Nagasaki tres días después era “inevitable porque había que seguir bombardeando objetivos militares japoneses hasta que Japón se rindiera”.

Estas enormes mentiras (cuanto más gordas más creibles, porque ... ¿cómo van a ser mentira tamañas aseveraciones? ), nos han alcanzado como podemos comprobar hasta 62 años más tarde, ya que nadie declara apologeta del terrorismo a Fumio Kyuma por justificar los genocidios, ni tan siquiera la historiografía oficial de los bombardeos los reconoce con claridad como tales.

Estas enormes mentiras de guerra ( y de Paz ) únicamente tratan de encubrir los verdaderos objetivos de estas “acciones de castigo”, otras desmoralizar al oponente , otras integrar o implicar a la población civil en las propias acciones...

No tardaremos en ver a Fumio Kyuma como asesor o/y socio o doctor “horroris causa” de alguna gran institución americana como pago a los servicios prestados.

2 comentarios:

HombreRevenido dijo...

Si alguna vez hubo un eje del mal allí estaba el Imperio Japonés, el ejército más cruel imaginable. La bomba atómica es una atrocidad, por concepto. Pero la catarsis del país es evidente.

Espero que nunca vuelva a suceder algo así. Pero la Segunda Guerra Mundial no fue algo normal(a la historia me remito)

Defender of the Faith dijo...

Estoy con hombrerevenido. Considero al ejército japonés peor que el nazi, mucho más fanático que las propias SS, sólo que los europeos no lo sufrimos a diferencia del nazi.

De todas maneras no justifico ni Hiroshima ni Nagasaki pero si las hubieran tirado sobre dos campamentos militares sin afectar a civiles no vería motivo de crítica. Al fin y al cabo se estaba en guerra, la II GM que, como dice hombrerevenido, no era para nada normal. Y después de la guerra, que es cuando se podrían haber juzgado estas salvajadas, se impuso la ley del vencedor (como en los bombardeos contra objetivos civiles, como Dresde). Ahora, salvo actos conmemorativos e indemnizaciones, no veremos nada más (como la desnuclearización militar, por ejemplo)